Vamos, que si me pilla el jefe con la polla peluda de su hijo en la mano, que lío.

Hoy promete ser el día más aburrido. tengo que aguantar al hijo del jefe y enseñarle de qué se trata el negocio. cuando lo veo me parece uno de los más extraños con ese cabello un poco largo y rubio y con esa ropa holgada con la que se viste. aun así no puedo dejar de mirar el bulto en sus pantalones. Cuando estamos en el almacén el hijo del jefe ya no parece tan tímido. me mira fijamente y me dice si quiero probar lo que tiene dentro del pantalón y que tanto me gusta. que verga tiene y que rico pajearla en mis manos.