Su trasero era pequeño, pero estaba preparado.

El maduro se dedicó a la música, concretamente a tocar el piano. pero no consiguió el dinero y se vio obligado a ofrecerse como maestro. uno de sus alumnos, un joven que vivía cerca de su casa, vino a dar su primera clase. pero como puede ver, ni siquiera llegaron a iniciarlo correctamente. el hecho de que ambos se conocieran y se desearan de verdad hizo que ese acercamiento se convirtiera en una serie de besos y caricias que terminaron con ambos totalmente desnudos. ambos vieron claro que lo ideal era ir a la habitación, una vez allí comenzaron a dar rienda suelta a todos sus deseos. lo que puso más cachondo al joven fue oler las axilas del mayor, incluso las lameduras. ese olor hizo que su polla se pusiera dura. después de hacerlo un rato se fue a comer su cola, y le fue bastante bien. entonces la madura se centró en el trasero del joven, era demasiado pequeño y quería saber si estaba listo para su polla. la lamió un rato y luego metió los dedos en ella, claro que su cola entraría sin problemas. lo folló a cuatro patas hasta que cambiaron de posición, el chico disfrutó como nunca de esa primera lección de piano.