Maduro ofrece pasta a un mendigo a cambio de sexo

El niño está en necesidad, tanto que está pidiendo limosna en la calle y, por supuesto, si te dan una buena cantidad de dinero por tener un rato de sexo con un extraño, entonces al menos lo piensas. Al principio dice que no, pero luego, entre el dinero, que el hombre maduro también tiene su rol y tal vez algo de curiosidad por ver cómo es tener relaciones sexuales con un tío, termina aceptando la propuesta.